Empieza a sonreir: Cómo las eMTB nos ayudan a conectar
La energía eléctrica puede aumentar la capacidad de casi cualquier bicicleta de montaña, pero no sólo te ayuda a mantener el ritmo o a superar las subidas. Tu vida social también puede mejorar.
Usted lo sabe. Nosotros lo sabemos. El beneficio de la asistencia eléctrica en una bicicleta de montaña -o en cualquier otro tipo de bicicleta- es obvio: la potencia para superar subidas u obstáculos que de otro modo te dejarían atascado o con dificultades. Además, una batería de gran capacidad ayuda a mantener la diversión durante horas. Después de dar una vuelta con asistencia eléctrica, hasta los más devotos riders "analógicos" lo admitirán: es muy divertido.
Pero ese impulso eléctrico puede servir para algo mucho más interesante. Al principio es menos obvio, a menos que hayas pasado años en la cola del pelotón, resoplando para seguir el ritmo de los más rápidos o, por el contrario, esperando delante a que los más lentos te alcancen: las eMTB son un gran ecualizador, que une a todo el grupo tanto en ritmo como en espíritu.
Es fácil dar por sentado el valor de este fenómeno, pero piensa en las personas con las que sueles montar en bicicleta. Es probable que se trate de un grupo relativamente homogéneo en cuanto a términos de velocidad y habilidad. Ahora, piensa en las personas que no están en tu grupo. Probablemente un montón de amigos y conocidos estarían si pudieran, pero no pueden o no quieren, porque el ritmo no es adecuado para ellos.
Y aquí entra en juego las bicicletas eléctricas de montaña. Ya sean rígidas o con suspensión total, con modelos como Moterra LT o Moterra SL, añadir un motor significa neutralizar las ventajas o los déficits de la forma física. Las diferencias de habilidad también ser reducidas, aunque en menor medida (porque no hay atajos para dominar la técnica en una bicicleta de montaña, sea con asistencia eléctrica o no).
Entonces, ¿quién puede beneficiarse más de montar en una eMTB? Es casi imposible pensar en alguien que no pueda. En última instancia, la respuesta es cualquiera que valore no sólo la propia salida en bici, sino también los elementos sociales que la convierten en algo más que un conjunto de tramos de sendero encadenados. Hay una fuerte correlación entre la asistencia eléctrica y el vínculo que se crea.
Por supuesto, no hay nada malo en perseguir en solitario récords personales, dominar tramos técnicos o simplemente disfrutar de algo de tiempo para uno mismo en la naturaleza. Pero recuerda que el ciclismo de montaña moderno nació cuando un grupo de amigos ciclistas del norte de California quisieron llevar sus bicicletas más allá de las carreteras y las pistas forestales. Como grupo, pasaron años modificando sus bicicletas hasta que pudieron conducirlas cómodamente fuera de la carretera y subir a lo alto de las montañas. Y se propusieron hacerlo juntos. Ahora, con las bicicletas eléctricas de montaña, todos podemos volver a hacerlo.